Leyéndole Blanca Nieves a mi nueva hermana – lo siento por la majadería del tema… es la única alusión que voy a hacer… lo juro jaja – descubrí de dónde todas las mujeres sacamos las ganas de ser rescatadas por alguien.
Siempre estamos en busca del príncipe azul que venga en su caballo blanco a rescatarnos de la malvada bruja (que en muchos casos son brujos… o simples circunstancias de la vida).
Piénsenlo, a Cenicienta la rescata un príncipe de su malvada madrastra; lo mismo le pasa a la mencionada Blanca Nieves; a la Bella Durmiente… sólo un príncipe es capaz de despertarla de su sueño encantado; Rapunsel… nuevamente es un príncipe “Encantador” que la saca de su torre-prisión, y así sucesivamente.
Pero, ¿quién dijo que alguien nos tenía que rescatar?, los que escribieron los cuentos eran hombres, probablemente con un gran paternismo y a lo mejor eran ellos los que querían rescatar a alguien.
¿En verdad necesitamos ser rescatadas?, ¿por qué no nos podemos rescatar solas? Es cierto que a veces uno se ve tan sobrepasada de problemas que le gustaría simplemente pasárselos a otra persona y decir… haz algo con esto por favor!!!
Pero si uno misma no es capaz de solucionar sus propias cosas… entonces después quién te va a rescatar de los problemas que tengas con el supuesto príncipe. Porque todas las escobas nuevas barren bien… pero después… se ven las verdades.
Si siempre estás esperando que alguien te rescate, entonces va a ser mucho más difícil estar conforme con las cosas que tienes en ese momento. Por un lado, porque vas a estar achacándole la responsabilidad de solucionarte la vida y de hacerte completamente feliz a otro… y eso no se puede hacer porque uno mismo tiene que buscar la forma de encontrar la alegría.
Por otra parte, porque siempre vas a tener dificultades… y cuando tengas problemas con el “príncipe” ¿vas a esperar que llegue otro para sacarte de las garras del ogro???
Es mejor ser capaz de curarte las heridas sola, sin ayuda, para después encontrar, no a un príncipe azul en un caballo blanco, sino a un hombre normal, que tenga defectos como todas las personas, para poder construir una relación mucho más sana y sin cargarlo con la responsabilidad de tener que sanarte de todos tus traumas.
Además, creo que la soledad está subvalorada, ¿qué tiene de malo estar sola???, conozco a algunas personas que tienen una extraña paranoia de creer que el resto de la sociedad las mira en menos por estar soltera… ¡¡¡todo está hecho para parejas!!! he escuchado decir por ahí… jaja… obvio… no necesariamente significa que va a ser una relación de pareja… pueden ser parejas de amigos… parejas de hermanos… parejas de primos… etc.
Al final… es cosa de cómo uno ve las cosas… si ves la soltería como algo deprimente, así va a ser, y eso no te va a permitir disfrutar de lo fantástico que es tener la libertad para hacer lo que quieras… y buscar diversiones en dónde quieras también.
A lo mejor estoy equivocada y uno en verdad necesita ayuda, pero creo que esa ayuda también puede venir de otras partes que no sean necesariamente un mino, pueden ser tus amigas, tu familia… un sicólogo por último!
Creo que a veces es necesario retirarse a un rinconcito por un tiempo… para después salir al mundo con la fuerza necesaria para afrontar nuevos dolores y valorar más las alegrías.
El problema claramente surge cuando te curas de unas y después vienen otras y otras… pero algún día va a llegar el momento de salir del rincón y sentir que tienes todo lo que necesitas… a veces es necesario comer tierra por un tiempo para después poder ser feliz.
